Cómo, cuándo y dónde tomar vino este 2021

Iniciamos un nuevo año con mucho optimismo y a la expectativa de, poco a poco, adoptar la nueva normalidad.

El vino y la temporada

El vino no se resume a la vendimia, o en lo que está en la botella. Hay mucho trabajo atrás de una copa de vino, muchísimo esfuerzo, pasión en el viñedo y, sobre todo, atención al detalle.

Las estaciones del año nos han servido por mucho tiempo como una guía para elegir el vino. Esto viene perfecto en territorios donde las estaciones son muy marcadas, pero en países como el nuestro el clima se cataloga por regiones y podemos llegar a tener distintos climas la misma semana.

Es por eso que mi consejo principal es considerar si servirás el vino solo o con alimentos y, lo más importante, el gusto de las personas con quienes lo compartirás. Otro punto importante es el presupuesto. Recuerda que el mejor vino es el que a ti te gusta.

Hablando de las características de los vinos, es un hecho que cada tipo cuenta con cualidades especiales que los hacen ideales para climas fríos o cálidos.

Primavera – verano

La recomendación son vinos blancos, espumosos y rosados que sean frescos, de buena acidez y livianos. Los vinos blancos son elaborados de variedades de uva cuyos aromas y sabores no son opacados por las bajas temperaturas en que se sirven, que es entre los 7° y 10°. Los espumosos son muy frescos y sus burbujas despiertan el antojo desde que son percibidas. Se sirven entre 8° y 10°.

Te recomiendo mucho el Chateau Domecq blanco, un vino con personalidad muy propia, de acidez media, carácter sedoso y notas cítricas, como mandarina. Acompáñalo con camarones, pescados o langosta; salsas a base de mantequilla, pastas medianamente condimentadas y quesos semi maduros. ¡Y reserva uno para la temporada de chiles en nogada!

Los rosados son los más asociados a la primavera, por ser finos, con mucha presencia de frutas y muy fáciles de beber. Son suaves al paladar y de cuerpo medio entre el blanco y el tinto.

Existe mucha gente que mantiene su gusto por el vino tinto en cualquier temporada y clima. Mi recomendación es elegir para esta temporada ejemplares jóvenes y ligeros, de cuerpo medio y de crianza breve en barricas de roble. Si las comidas serán pesadas; como en asados, con pastas o carnes rojas, es bueno tener un tinto más poderoso. Los tintos se toman regularmente a temperatura ambiente, entre 16° y 19°.

Para los amantes del tinto recomiendo el Chateau Domecq Tinto; complejo y especiado con notas de frutos rojos del bosque. Ideal para acompañar cortes de caza mayor, sabores dulces y especiados como el mole negro oaxaqueño.

También está Reserva Real, un Syrah 100% que te recomiendo tomar solo o con comida poco grasosa y postres de chocolate.

Otoño – invierno

Cuando baja la temperatura principalmente se toman vinos tintos, de taninos altos y buen cuerpo para mitigar el frio. Aunque en la mayoría de nuestro país el otoño no está tan marcado, empezamos a notar el cambio en los colores de la vegetación y la baja de temperatura nos empieza a orillar a planes que impliquen estar dentro de casa. 

Si bien el vino tinto es el más adquirido durante todo el año, empezando esta temporada incrementa su consumo. Se van sustituyendo las etiquetas frescas y jóvenes, cediendo ante los que tienen más cuerpo y estructura, ideales para la carga calórica que viene en estas fechas, como los platillos de cocciones largas.

Te propongo tengas un Chateau Domecq Tinto para disfrutarlo en un brindis entre amigos o maridando platillos especiados y carnes rojas. Su color granate te quitará el frío de solo apreciarlo.

No puede faltarte Reserva Magna, un imponente tinto altamente estructurado y muy complejo que servido solo te permite apreciar su gama olfativa de frutos negros y notas de chocolate amargo.

Si tu gusto se inclina por los blancos, considera los que tenga madera, para aumentar el volumen en boca, con una graduación alcohólica más alta. Prueba con Chateau Domecq Blanco: la sedosidad y cuerpo que lo caracteriza complementa perfecto con las comidas tradicionales de la temporada.

Una vez llegado el invierno y sus celebraciones de fin de año, es momento de dar pie a los espumosos que, abanderados por el Champagne, están asociados a momentos de júbilo y gran festejo. Pero no lo reserves solo para el brindis; prueba a maridar ostras, langosta o paella. Y para el postre nada mejor que servirlo con pays, como el de limón o el de cereza.

Alberto Verdeja.

Wine Maker Bodegas Domecq.