Evolucionar (y arriesgar) para ganar.
Parte fundamental del trabajo de cualquier mercadólogo es escuchar: Conocer las preferencias y necesidades de sus audiencias, y satisfacerlas.
Tener ese pulso del mercado es el ingrediente fundamental de cualquier receta comercial exitosa. Cada vez que una campaña es laureada por el público, los medios y la propia industria publicitaria, la razón de fondo es que el anunciante supo entender la mente y corazón de su audiencia en un momento determinado, y reaccionó creativa y oportunamente con los mensajes correctos para motivar a su público.
México se ha convertido en un portentoso nodo creativo para todo el Continente. Aquí trabajan muchos miles de profesionales del mundo entero, quienes en nuestro país han encontrado tierra fértil para la creatividad, con una industria local vibrante que anualmente produce muchos miles de campañas que buscan mover la aguja del negocio de sus clientes, los anunciantes.
Por eso es notable que una marca reciba un reconocimiento como los Monstruo De la Mercadotecnia, otorgado por la revista Expansión. Pero más extraordinario aún es el que una marca reciba dos galardones el mismo año, por dos campañas cuyo único común denominador es precisamente ese: Que sus estrategas supieron escuchar, quisieron entender y estuvieron incluso dispuestos a evolucionar… y a arriesgar.
Naturalmente estamos hablando de Tecate, una de las marcas mexicanas de Cuauhtémoc Moctezuma HEINEKEN México, empresa que recientemente también recibió el Premio Effie como Anunciante del Año. Las campañas en cuestión, que sin duda tuvieron mucho que ver para que CMHM ganara como empresa anunciante, demuestran la importancia de saber interpretar el sentir de la gente para hablarle con mensajes que respondan al sentimiento colectivo.
En su campaña Por Un México Sin Violencia Contra la Mujer, Tecate, una marca tradicionalmente ligada al mercado masculino, supo entender el momento que viven millones de hombres mexicanos, quienes actualmente aspiran a una nueva masculinidad donde el respeto a la mujer es un valor irrenunciable. Al jugarse por una campaña de género, la marca incluso se atrevió a desafiar a quienes no comulguen con el valor del respeto a las mujeres.
Este concepto, llevado a una ejecución fílmica de clase mundial, catapultó a la campaña de Tecate, desde su pauta comercial hasta convertirse en el tema de conversación en medios, redes y círculos de influencia. Al unísono, la sociedad aplaudió el arrojo de una marca que nunca dejó de hablarle a sus hombres, pero sí evolucionó el mensaje para mantener e incrementar su relevancia.
Por otra parte, Tecate tampoco olvidó el humor como arma infalible para resonar con los consumidores, y nos presentó Te Hace Falta Ver Más Bax. Con esta campaña, la marca aprovechó su fuerte asociación con el boxeo, para jugar con percepciones sobre qué es masculino, y qué no. Fue el entrañable Sylvester Stallone quien apadrinó las diversas ejecuciones de esta divertida campaña, acompañado en ocasiones por célebres púgiles mexicanos.
Merecidos ambos reconocimientos a una marca mexicana que ha sabido escuchar y evolucionar, al grado que en 2016 logró hablar con su público dos lenguajes completamente distintos, pero que ciertamente coexisten en la realidad de los nuevos hombres mexicanos, quienes saben qué cosas deben tomarse en serio, y cuáles no tanto.