Los tamales son uno de los platillos favoritos de los mexicanos, además de ser un clásico de la temporada. Durante estas fechas se consumen alrededor de dos millones de tamales, ya que de acuerdo con un sondeo de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), el 90% de los mexicanos celebran el día de la Candelaria con tamales.
Aunque los tamales más consumidos son los verdes, dulces, de rajas, mole y oaxaqueños, existen más de 500 tipos en nuestro país y normalmente se comen en compañía de la familia u amigos.
De acuerdo con el estudio de Worldpanel Usage de Kantar Worldpanel, los mexicanos principalmente comemos tamales por antojo, en una ocasión especial o por comer algo rápido.
Por esta razón La Costeña, la cual tiene como objetivo llevar los sabores típicamente mexicanos a la mesa de sus consumidores, decidió lanzar en 2015 su línea de tamales, con la que abrió una nueva categoría en el mercado.
Elaborados en la planta de San Luis Potosí, los tamales La Costeña son una muestra de innovación en la industria de alimentos. Acreditados bajo el sello TIF, su empaque permite que se mantengan hasta dos años en el anaquel, además de que están siempre listos para su consumo y solo necesitas calentarlos 1 minuto en el microondas y estarán listos para disfrutarlos.
Asimismo, todos los ingredientes se seleccionan cuidadosamente y están preparados de manera tradicional, lo que permite compartir con el mundo el auténtico sabor mexicano.
Actualmente están disponibles en 4 variedades (dulce, rojo, verde y elote) y los consumidores pueden encontrarlos en cualquier tienda de autoservicio. Gracias a su practicidad y rico sabor se han convertido en uno de los favoritos de los mexicanos, posicionándose como el líder de los tamales empacados en el país.
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