Esta temporada de vacaciones y la llegada del calor de verano es la ideal para compartir con los más pequeños de la casa y que mejor manera de hacerlo de una forma entretenida, nutritiva y además deliciosa, preparando un riquísimo helado.
El aceite de oliva es tan versátil que se puede crear casi cualquier cosa con él, una prueba de esto, es este delicioso y cremoso helado de sabor suave que incluso puede ser acompañado de un toping de crema balsámica o disfrutarlo solo. Te compartimos la receta.
Porción: 4 personas
Tiempo: 30 minutos
Dificultad: Fácil
Ingredientes:
100 ml de aceite de oliva extra virgen Borges
500 ml de leche entera
6 yemas de huevo
125 g de azúcar
100 ml de miel
20 g de crema balsámica de módena Borges (opcional)
Procedimiento:
Bate las yemas con el azúcar en un bol hasta que este quede disuelto e integrado en la mezcla.
Por otro lado, calienta la leche y cuando alcance los 45°C, agrega la mezcla anterior.
Remueve bien sobre el fuego hasta que espese.
Con la mezcla bien homogénea, aparta del fuego y vierte el aceite de oliva extra virgen Borges. Mezcla hasta disolverlo. Añade la miel y vuelve a mezclar.
Deposite en otro bol y deja enfriar.
Una vez fría, congela la mezcla durante un mínimo de 5 horas. Es importante remover la crema congelada cada hora para evitar cristales de hielo y garantizar la cremosidad del helado resultante.
Déjalo a temperatura ambiente antes de servirlo. Si quieres puedes agregarle la crema balsámica de módena y un poco de azúcar a modo de contraste y de decoración.