A partir del éxito de Shiri de Kang Je-gyu en 1999, el cine de Corea del Sur se convirtió en un referente importante del arte fílmico contemporáneo gracias a su arriesgada mezcla genérica, rigor técnico y preciosismo estético, características que lo emparejaron con el cine de Hollywood.
Con la finalidad de acercar al público a lo más destacado del séptimo arte en Corea, la Semana de Cine Coreano ofrecerá al público mexicano un abanico de 10 películas a proyectarse del 27 de agosto al 7 de septiembre en la Sala 1, Jorge Stahl de la Cineteca Nacional. El ciclo se presenta gracias a la colaboración entre el Centro Cultural Coreano, El Consejo de Cine Coreano (KOFIC) y la Cineteca Nacional, sede de esta programación, y en el marco de los Encuentros Corea – México organizados por el IMCINE y el KOFIC.
La muestra, en la cual los cinéfilos mexicanos apreciarán diversos géneros como el thriller y sobre todo el drama, arranca con La Novela Rusa (Reoshian soseo 2012), de Shin Yeon-shick. El filme retrata la historia de Shin-hyo, escritor desconocido que fracasa en el intento de suicidarse y tras 27 años de encontrarse en estado vegetativo, despierta y se entera de un suceso increíble: su novela es considerada una obra maestra.
En Juego Rudo (Baewooneun baewooda 2013), igualmente de Shin Yeon-shick, el protagonista es Young, un actor que tiene la oportunidad de descubrir el misterioso mundo de la fama, el poder y el placer. Sin embargo, no es lo único en su sendero: el lado oscuro, la vida glamorosa y el crimen lo hacen consciente de la situación peligrosa en la que se ha inmiscuido.
La semana continua con El Camino de Regreso a Casa (Jibeuro ganeun gil 2012), un trabajo de Pang Eun-jin en el que una ama de casa es encarcelada en Francia como traficante de drogas y enviada prisión en la remota isla atlántica de Martinica, a 22 horas y 12,400 kilómetros de su hogar en Corea, por lo cual su marido intentará recuperarla.
La historia de un hábil lector de rostros llamado Nae-kyung, a quien se le ofrece la oportunidad de colaborar con la geisha Yeon-hong, se aprecia en El Lector de Rostros (Gwansang, 2013), de Han Jae-rim. Al aceptar la propuesta, el personaje principal se enreda en un caso de asesinato. Sin embargo, Nae-kyung identifica con éxito al asesino debido a sus habilidades y talento.
En Norah Noh (2013) de Kim Sung-hee, se cuenta la vida de una diseñadora que dominó la escena de la moda coreana en su momento, quien junto al joven estilista Suh Eun-young creará un nuevo espectáculo. Norah Noh diseña ropa con tamaños estándares y dota de estilo al dúo vocal Pearl Sister al vestir a la cantante coreana Yoon Bok-hee con una minifalda.
Una variedad de temas caracteriza el cine coreano.
En el largometraje dirigido por Lu Zhang, Gyeongju (2014), la nostalgia y muerte de un amigo llevan a un hombre de regreso a su pueblo natal en la provincia coreana de Gyeongju. Durante su estancia conocerá a una mujer con quien no tarda en establecer algo más grande que una amistad, pero al mismo tiempo se ve envuelto en una intriga policiaca.
Hacia el final de la guerra de Corea, un destacamento se adentra en territorio enemigo con la finalidad de conquistar una estratégica posición. La película de Hun Jang, El Frente (Go-ji-jeon, 2011), cuenta tal historia centrada en un soldado que reencuentra a un viejo amigo, transformado en una máquina de matar. Producido en forma espectacular, este melodrama reflexiona acerca de los absurdos de la guerra.
La animación también llega a las salas de la Cineteca Nacional
El Rey de los Cerdos (Dwae-ji-ui wang 2011). En 97 minutos y con una energía admirable, el director Yeon Sang-Ho involucra a dos hombres que esconden un terrible secreto. Mientras tanto, su ciudad vive bajo la amenaza de un asesino en serie. Se trata de una pieza alejada de la estética del film noir o el cybertech, muy en deuda con el cine de Park Chan-wook, en particular con Oldboy (2003).
El filme de Yeon Sangho, titulado La Estafa (Saibi 2013). La trama comienza en un poblado rural que está por inundarse, hecho por el cual sus residentes son compensados para una reubicación. El hecho representa una oportunidad para el estafador Choi, quien intenta convencer a los pobladores desamparados con una doctrina religiosa falsa para que donen sus compensaciones a la Iglesia.
Finalmente, la Semana de Cine Coreano presenta Encuentro Fatal (Yeokrin, 2014) de Lee Jae-kyoo. Ambientada en el siglo XVI, durante la dinastía Joseon, e inspirada en hechos históricos auténticos, narra las andanzas de un desalmado mercenario quien es obligado a asesinar a un soberano, apodado “El rey del infortunio”, a cambio de la vida de su amada.
Para enterarte de los horarios, entra a la página de la Cineteca Nacional.