El escultor mexicano Soria develo la obra “El Vuelo”

Después de su exitosa participación en la subasta Arte Vivo que año con año organiza la Fundación México Vivo y de su presencia en exposiciones conjuntas en el restaurante Au Pied de Cochon Santa Fe y el hotel Live Aqua México City, el escultor mexicano Soria develo la obra “El Vuelo” durante la celebración del cumpleaños de Desirée Navarro, quien cuenta con una importante trayectoria en el mundo de la comunicación y ha desarrollado una labor influyente en la industria del diseño desde hace 20 años.

El vuelo

“Libertad aprisionada con anhelo de alcanzar el amor puro en un mundo terrenal”.

Pieza emblemática de la colección “Obras con movimiento suave”.

Las alas siempre se han asociado a divinidad y misticismo, además de evocar algo hermoso, bueno, y sobresaliente. La obra es intensidad, amplitud y sentimiento. La intensidad es anhelo por retornar a un mundo celestial. La amplitud, son los movimientos suaves y cadentes, son libertad aprisionada. El sentimiento es la sensación de querer ir más allá. Y el color rojo es simplemente pasión y amor.

Obra en resina con pintura, medidas 70x65x30.

Mauricio Soria Aguilar nació en la Ciudad de México en 1969. Desde muy pequeño manifestó una gran inquietud por desarrollar sus habilidades artísticas, sin embargo, esto no le fue posible sino hasta alcanzada su madurez.

En su obra se contempla una realidad transformada en curvas y líneas perfectamente equilibradas que deja a la vista ideas alternas de una belleza extraordinaria, así, lo que parece ser una figura femenina, bien podría percibirse como una pareja de aves.

La creatividad que manifestara en algún momento de su juventud, se desarrollo de forma más completa en el campo de las artes plásticas a partir del 2013, cuando ingresó a la Academia del Maestro Gustavo Salmones.

En 2014 expuso en Moble, Polanco y Thomas Hill. Además participo en el concurso de la Fundación de CURSOL–Cultura de Recursos y Solidaridad de la Comunidad Valenciana en España; y en Italia, en el Premio Arte Laguna en Milán.

Su obra toma fuerza a través de los diversos materiales y colores con los que trabaja, lo que le imprime un sello único y personal. El acabado detallado refleja la perfección y el cuidado  en cada pieza. Emplea técnicas como resina, metales y arcillas.

La creación de cada obra es un momento que se trasforma con la personalidad del artista. Las composiciones de dos y tres piezas para dar definición a un diseño son rasgos que sobresalen y refuerzan la idea de “equilibrio con movimiento suave”.

De las experiencias vividas en los viajes realizados a lo largo de estos años, surge en él la necesidad de manifestar las sensaciones de su entorno, percibiendo a través de sus sentidos siluetas que, si bien ya existen, al pasar por sus manos adquieren formas alternas, y de una perfección sin igual.

Gran parte de sus creaciones son resinas con pintura automotiva, las cuales definen parte del estilo de sus “obras equilibradas con movimiento suave”. Sin embargo, también muestra interés por desarrollar obras con materiales como bronce, acero, madera y arcillas. Las obras que combinan materiales, texturas y colores forman parte del estilo “sin límites”, los cuales destacan en su trabajo.

La pintura es un área interesante que ha desarrollado, sin embargo, la satisfacción y emoción que la escultura le ha generado, aún no es superada por los pinceles. Los trazos que se perciben en las pinturas, combinando colores y textura transforman los cuadros en ambientes familiares y comunes pero ambiguos, lo que trasmite sensaciones sutiles y cotidianas.

Todas las emociones de la vida son “obras con movimiento suave”.

Soria